La idea del proyecto de vivienda popular única surge de un acuerdo de ideas para ejecutar entre organizaciones populares.
Lautaro Cruciani, referente del movimiento Evita y candidato a legislador provincial, nos comenta que la situación de los albañiles, por ejemplo, es trabajar toda la vida construyendo la casa a otras personas sin tener una propia, y la mano de obra de casi todas las construcciones viene de los sectores y barrios populares.
La propuesta es construir 3 mil soluciones habitacionales de manera directa y generando 10mil puestos de trabajo, con preferencia habitacional para las mujeres que han sido víctimas de violencia de género con una cuota que no supere un porcentaje de 2 salarios mínimos, accesible para los sectores populares. Además, también habría una preferencia en los puestos de trabajo.
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